Una encuesta de Future Workplace, empresa de investigaciones especializada en preparar a los líderes ante interrupciones relacionadas con la contratación, el desarrollo y la experiencia de los empleados, llegó a la conclusión recientemente de que el 76 % de los encuestados pensaba que, en lo que respecta al trabajo, ya no se trata solo de dónde se trabaja, sino de qué se consigue hacer. Esta idea está relacionada con los cambios generacionales en la experiencia del lugar de trabajo, no solo físicos, que se analizan en función de las herramientas y tecnologías utilizadas. La encuesta mostró que el 62 % de los encuestados pensaba que la tecnología debería ayudar a los empleados a ser más productivos y a colaborar de una forma más interactiva.
Todo está cambiando y mucho más desde la llegada del Internet de las cosas (IoT). El IoT ha sentado las bases de una revolución tecnológica. Máquinas de todas las formas y tamaños ubicadas en nuestros hogares y oficinas, así como en el mundo que nos rodea, comienzan a comunicarse y a automatizar pesadas tareas y cargas de trabajo, se ocupan de nuestras necesidades y nos permiten centrarnos en los aspectos más importantes del negocio.
La estrategia Workplace of the Future requiere equipos que trabajen de forma más inteligente y eficiente en colaboración, ya sea cara a cara o separados por miles de kilómetros. Según una encuesta de Deloitte Millenial, el 59 % de los considerados "milenials" tiene en cuenta el estándar de tecnología que le ofrece un posible empleador a la hora de considerar un puesto de trabajo. Además, el 78 % de ellos afirmó que le influye el nivel de innovación de una empresa al solicitar un puesto de trabajo.