Sin lugar a duda, siempre ha habido una necesidad de mantener la seguridad de las personas en los sistemas de transporte público de municipios y ciudades, tanto en los vehículos, como dentro o en los alrededores de las estaciones.
En los últimos años, sin embargo, con la proliferación de actos de terrorismo, crímenes, robos o vandalismo, y el consiguiente endurecimiento de las normativas gubernamentales, los desafíos a los que se enfrentan los responsables de gestionar dichos sistemas han evolucionado y se ha producido un aumento de la demanda de sistemas de seguridad.
Las ventajas de la instalación de cámaras de vigilancia en los sistemas de transporte público son enormes. Ayudan a mantener la seguridad de usuarios y empleados, y a que las redes de transporte funcionen con fluidez en todo momento. Los sistemas de vigilancia inalámbricos hacen que los usuarios de medios de transporte se sientan más seguros, fomentan la movilidad y disuaden a los malhechores de cometer crímenes y actos vandálicos. Gracias a ellos, los pasajeros sienten mayor seguridad a la hora de usar los sistemas de transporte, especialmente durante la noche.
Los sistemas de cámaras de vigilancia se ubican de forma discreta, y son sólidos y fiables. Son adecuados para su uso en zonas de interior y exterior, en cualquier tipo de vehículo, en andenes, salas de espera o espacios públicos, a cualquier velocidad y en cualquier condición meteorológica.
Las cámaras MOBOTIX están fabricadas en Alemania y ofrecen calidad y fiabilidad técnica garantizadas, así como la máxima cobertura con el mínimo número de cámaras, gracias a que incluyen tecnología hemisférica. Además, al precisar menos mantenimiento, la rentabilidad de la inversión es mayor.